martes, 14 de abril de 2009

EL DENGUE TIENE RESPONZABLES

Cuando uno escucha a la ministra Ocaña, queriendo desligar responsabilidad y achacarla a Bolivia como responsable, y su entrada por Jujuy y relata toda una hoja de ruta que recorrió el dengue, pensamos que nos está tomando por idiotas. El único recorrido que tiene el dengue es la ruta de los Alfonsín, los Menem, los De la Rúa, los Duhalde y los "K" y toda la plana política que acompañó sin mediar ningún tipo de resistencia. A medida que se instalaba la desocupación, la liquidación del presupuesto de salud y la miseria, se iba instalando el "dengue", asta hacerse crónico, ya que en los pozos de la pobreza nace, ahi donde falta un techo digno, la única barrera contra toda enfermedad endémica.

La proliferación de los asentamientos, sin los servicios básicos como cloacas, recolección de residuos, agua potable, es un aporte al crecimiento de la epidemia, la cantidad de basurales a cielo abierto es otro generador, el avance de la sojización, sembrando miseria, catástrofe y muerte, como en Tartagal, todo contribuye a que el dengue y la endemia se vaya instalando en una sociedad donde la clase gobernante, solo piensa en salvar a los patrones, aunque en ello la clase trabajadora pague los costos.

Pero lo mas contradictorio de esto es que la epidemia del dengue no reconoce capas sociales, se les instaló en los grandes parques de los barrios cerrados, en sus piletas de natación siendo ahora uno de los mas grandes caldos de cultivo de los vectores; ante esto el estado que hecha agua por todos lados, no tiene la capacidad suficiente para dar repuesta a tal catástrofe, solo usa la mentira, para frenar el pánico, pero el pánico está instalado, el pueblo gastó todo el insecticida y repelente en plaza, y estos no se hicieron esperar, aumentaron los precios de los mismos en cifras escalofriantes, los pulpos que manejan el negocio de los insecticidas y repelentes hicieron su agosto a costa de las víctimas del dengue.

Los hospitales no están al altura de la situación, al no tener suficientes camas para alojar a los pacientes con los síntomas de la enfermedad, mandando a los mismos a sus respectivas casas con paracetamol para aliviar su dolencia, permitiendo de esta manera que un mosquito no infestado se infeste, poniendo en riesgo a los habitantes de esa misma casa o a los que vivan dentro de los cuatrocientos metros a la redonda permitiendo la proliferación de la enfermedad, o bien que el paciente vuelva a ser picado y agrave su salud, de esta forma logra una cama en el hospital y en muchos casos es tarde.

Nadie obliga a la ministra de salud a que ponga a funcionar los hospitales de campaña, a que tomen mas personal y aislar la mayor cantidad de personas con síntomas, para evitar la proliferación. Hacen infructuoso el aprendizaje de nuestros hijos a que nos obliguen a descacharrar, si el primer generador del dengue es el sistema de salud.

Estas elecciones deben ser una oportunidad de poner blanco sobre negro, los que estamos mas propensos a pagar caro la inoperancia del estado y sus alternativas políticas, es decir los trabajadores debemos conformar una alternativa anticapitalista.

domingo, 5 de abril de 2009

PARA QUE LA REELECCION

Cuando uno ve y escucha, la forma en que los partidos tradicionales de la burguesía, se han lanzado a los acontecimientos preeleccionarios, nos damos cuenta de que mordieron el anzuelo.
El adelantamiento de las elecciones, producto de la crisis económica y política, primero porque la crisis internacional se esta llevando a la rastra a varios gobiernos capitalistas y política, aquí en la Argentina producto del conflicto con el campo, ya que la crisis mundial también le pega al capital sojero, y estos echan mano a todo lo que tengan a su alcance, la liquidación de las retenciones, y una mega devaluación, sería un alivio a los pool sojeros, no así a los pequeños y medianos productores, y también al clan del gobierno, que pone cifrada esperanza a que los pooles vendan los granos retenidos, ya que es la caja recaudadora que garantiza el pago de las deudas públicas y privadas.

La crisis no dará lugar a un impasse, por lo tanto el adelantamiento de las elecciones, sería la pantalla para desviar la atención de las consecuencias, es decir, los tarifazos, los despidos, los reclamos de aumento de salarios, del dengue y todo lo que afecta a la clase trabajadora.
Las banderas del gobierno, y la centro izquierda sojera, de la redistribución de la riqueza y las retenciones divididas, pasó a ser una mera exaltación de deseo, ante la magnificencia alcanzada por la crisis.

Ante este panorama que se avecina, la clase obrera, depende de la independencia de su política, la defensa de los puestos de trabajo y el aumento de salario.

En este contexto la clase obrera deberá elevar las banderas de que la crisis la paguen los capitalistas, que la izquierda conforme una coalición anticapitalista, como expresión política propia de la clase obrera.